Las llantas de bicicleta son un componente esencial para garantizar un rendimiento óptimo en cada ruta. Diseñadas para ofrecer resistencia, ligereza y estabilidad, estas llantas se adaptan a diferentes disciplinas como carretera, montaña, gravel o cicloturismo. Fabricadas con materiales de alta calidad como aluminio o carbono, destacan por su durabilidad y capacidad para soportar terrenos exigentes.